Eruditos Investigadores Correligionarios de las Ciencias Sabias e Inútiles

Reconocemos públicamente la absoluta irrelevancia de la 'Ciencia de las Soluciones Imaginarias y de las Leyes que regulan la excepción en Chile

MIERDRA!

viernes

ROCE

Atrito
Amanhã-é-hoje-nascendo do fundo.
Por Pablo Wajner.
A Música dos desígnios atravessa as nítidas lâminas do espaço.
Ele segue ali
esburacado como um queijo de certezas vazias.
Cintilam os jardins do mundoante o estático das evidências nuas.
Girando sobre áureos pilaresse enerva minha embriaguez transbordante.
A região indiferente se dissolve
misturando-se com indefinidas superfícies.
Em nossos peitos jaz a noite.
Amanhã-é-hoje-nascendo do fundo
da profundeza noturna que hospeda
a Barcastral que navega sigilosa
para o dourado sol de proa.
As esteiras de popa não são vistas.
Do futuro iluminado
noite Mãe e parteira
dos olhares enlaçados que oscilam flutuando azarosas
no horizonte prateado de lácteos futuristas.
Me abrigo sob um pedaço de céu.
Seu tabique parece ser o único que existe.
Unha de lua escapando das garras do abominável edifício.
Citados constructos construídos derredor.
Citadas luzes de eletromagnetismos mortos.
Demoli-las.
Os dias me impulsionam a quicar contra a fogueira-cultura
coroada com flores cinzas.
Clandestinos ainda respira solos tíbios
que fecundam nossa ensonhação.
Esplêndidos relatos de peles calcinadas.
As estrelas devolvem a luz a meus olhos.
Geometrias dormem neutralizadas proporções.
O infanciente defeca cocóstrofes.
Densa leveza de sangue espantada de sentido.
Mortas vão dando voltas as voltas vivas. Mortas.
Os desejos numinosos da infancianterior entre cantos pululam

sopros níveos de eternidade imaginante.
Te desembaraça, espírito dos fluidos do corpo gozo.
O escondido Fazedor das terríveis simetrias noturnas
boceja oculto sumido em seu nicho escuro.
As janelas da alma são lavradas
pelas tíbias mãos do outono
tingindo-se de um furioso tom rubi.
Despojados reflexos deslumbram tropas de aves maniatadas
que jazem sobre a face de ruidosos arados.
Os cantos resplandecem ao roçar velhos prantos.
Tristes sorrisos decoram em vãoas nostalgias que emanam
em montões de lírios empilhados.
A bengala lançada adiante
acende extensos montes de papelão.
As cinzas destes lhe servem de tumba.

em nossos peitos jaz a noite.

Hábitos de uma morte consumada
buscando o eterno presente da vida.
Astros enrolados repousam no sonho do homem.
Furiosos se estremecem os ninhos.
Germes de cimento fresco secando no caminho.
O tempo nos aproxima da terra. Despedimos seu fogo.
Ardem os movimentos que se alimentam de ventos vizinhos ao Sol.
Distâncias esféricas.

As estátuas devoram a avareza do ser.

Versão em português de Tali Feld Gleiser.

ROCE
La Música de los designios atraviesa las nítidas láminas del espacio.
Él sigue allí
agujereado como un queso de certidumbres vacías.
Centellean los jardines del mundo
ante lo estático de las evidencias desnudas.
Girando sobre áureos pilares
se enerva mi embriaguez desbordante.
La región indiferente se disuelve
mezclándose con indefinidas superficies.
En nuestros pechos yace la noche.
Mañana-es-hoy-naciendo del fondo
de la hondonada nocturna que hospeda
la Barcastral que navega sigilosa
hacia el dorado sol de proa.
Las estelas de popa no son vistas.
Del futuro iluminado
noche Madre y partera
de las miradas enlazadas que oscilan flotando azarosas
en el horizonte plateado de lácteos futuristas.
Me cobijo bajo un pedazo de cielo.
Su tabique parece ser el único que existe.
Uña de luna escapando de las garras del abominable edificio.
Susodichos constructos construidos derredor.
Susodichas luces de electromagnetismos muertos.
Demolerlas.
Los días me impulsan a rebotar contra la hoguera-cultura
coronada con flores grises.
Clandestinos aún respiran suelos tibios
que fecundan nuestra ensoñación.
Espléndidos relatos de pieles calcinadas.
Las estrellas devuelven la luz a mis ojos.
Geometrías duermen neutralizadas proporciones.
El infanciente defeca cacástrofes.
Densa liviandad de sangre espantada de sentido.
Muertas van dando vueltas las vueltas vivas. Muertas.
Los deseos numinosos de la infancianterior entre cantos pululan

soplidos níveos de eternidad imaginante.
Desenredate espíritu de los fluidos del cuerpo goce.
El escondido Hacedor de las terribles simetrías nocturnas
bosteza oculto sumido en su nicho oscuro.
Las ventanas del alma son labradas
por las tibias manos del otoño
tiñéndose de un furioso tono rubí.
Despojados reflejos encandilan a tropas de aves maniatadas
que yacen sobre la faz de ruidosos arados.
Los cantos resplandecen al rozar viejos llantos.
Tristes sonrisas decoran en vanolas nostalgias que emananen montones de lirios apilados.
La bengala lanzada delante
enciende extensos montes de cartón.
Las cenizas de estos le sirven de tumba.

En nuestros pechos yace la noche.

Hábitos de una muerte consumada
buscando el eterno presente de la vida.
Astros enrollados reposan en el sueño del hombre.
Furiosos se estremecen los nidos.
Gérmenes de cemento fresco secándose en el camino.
El tiempo nos acerca a la tierra. Despedimos su fuego.
Arden los movimientos que se alimentan de vientos vecinos al Sol.
Distancias esféricas.

Las estatuas devoran la avaricia del ser.

Dr. Wajner